Navidad con los pobres siendo rico

Por tercer año consecutivo hemos celebrado la Navidad con nuestros niños de San Blas, niños muy pobres, por cierto.

Y de nuevo una mirada a la vida, una vida llena de contrastes, nos quita el sueño. Uno se ve rico al lado de toda esta gente. Y damos gracias a Dios por tener lo que tenemos. No nos convence que la riqueza se mida comparándose a los que tengan más. ¿No es más justo compararnos con los que tienen menos?

No seremos ricos por tener muchas cosas materiales, pero tenemos unos estudios, una cultura, unos conocimientos que nadie nos puede ya quitar; una familia o unos amigos que no nos permiten que nos falte lo esencial; tenemos nuestra Seguridad Social que, aunque en ocasiones deje mucho que desear, es muy superior a lo que aquí encontramos; tenemos siempre de dónde sacar para comer.

Sí, también en Navidad el mundo sigue dividido entre ricos y pobres. También en Navidad muchos niños no ven realizados sus sueños. Por muchas cartas que escriban a Santa Claus, o a Papá Noel, o los Reyes Magos, o al Niños Dios… no van a recibir ese juguete que quizás miraron en un escaparate o vieron en TV. La “Magia de la Navidad”, de nuevo, no es para ellos.

Por esta razón, aunque un año más hayamos podido vivir la Navidad de otra forma, hayamos podido hacer un poco más felices a más de cien niños de San Blas, hay mucho por hacer, y no sólo en estos días.

Es cierto que la Asociación Hijos del Maíz se siente orgullosa de lo que hace gracias al apoyo de muchas personas. Somos conscientes de que no podemos arreglar todos los problemas de esta tierra nicaragüense. Pero por ello, queremos seguir luchando para que nuestra riqueza sea un camino para compartir con quienes tienen menos, para que la Caridad (alguien la llama hoy solidaridad) nos siga empujando a reconocer que somos unos privilegiados y que la mayor alegría está en dar, mucho más que en recibir. Y ahora, ESCUCHA. ¿Tendremos razón?

Reflexión para Navidad

XVII Mercadillo solidario en María Mediadora, Salamanca

En estos días, en los salones de la parroquia de María Mediadora de Salamanca, se está celebrando el XVII Mercadillo Solidario, con el fin de recaudar fondos para esta Organización, al tiempo que queremos concienciar a las personas que por él pasen.

Somos muy conscientes del mal momento económico que estamos viviendo desde hace ya unos años. Por esta razón, hemos visto cómo los ingresos de donaciones y colaboraciones han disminuido considerablemente en muchas ONGs, y nosotros no escapamos a ello.

Sin embargo, no podemos permanecer de brazos cruzados y seguimos, aunque los resultados no sean los esperados, realizando este tipo de actividades. Es mucho más importante en muchas ocasiones el darnos a conocer y el comunicar que también en otros lugares se pasa muchísima necesidad.

Este tipo de actividades conlleva mucho esfuerzo, pero todo ello se ve compensado por la gratuidad de las personas que colaboran más directamente y por la generosidad de todos aquellos que regalan cosas para que otros puedan beneficiarse.

También queremos destacar a aquellas personas que llegan a comprar algún objeto, no siempre necesario, pero importante para realizar su colaboración. Y cómo no, aquellos que, pasándolo mal en nuestro país, ven la oportunidad de adquirir aquello que por los cauces normales no podrían o les resultaría muy costoso.

Aprovechamos la oportunidad de esta publicación para agradecer a la Parroquia de María Mediadora su disponibilidad para acogernos, al igual que a la Asociación de Vecinos Avesal, siempre comprometida con los grupos más desfavorecidos.

Graduación de nuestros chilotitos

Y el curso escolar se nos marchó como un suspiro. Casi sin darnos cuenta los 31 niños que comenzaron este cuso a finales de enero lo han concluido.

Seis años de vida, seis años de trabajo, pero seis años de alegrías las que nos han dado los 180 niños que han pasado ya por nuestro Preescolar “Los Chilititos” (se toma este nombre por el “chilote”, la primera fase de la mazorca de maíz, cuando aún está muy tierna). Los primeros que comenzaban, en el año 2008, terminan ya su primaria. Pero lo más importante, lo que nos llena a todos de gozo, lo que nos hace seguir trabajando y creyendo en este proyecto, cada vez más convencidos de que vamos por el buen camino y cada vez con más fuerza, es que ni uno sólo ha abandonado los estudios y, más aún, ninguno de estos 180 alumnos ha tenido que repetir curso.

Se ha logrado que los niños de esta Comarca de San Blas realicen los cursos escolares de acuerdo a su edad. Ya no se mezclan niños de edades muy diferentes como ocurría anteriormente, a veces hasta con cinco y seis años de diferencia (había niños que abandonaban y después de varios años de absentismo regresaban a la escuela). Esto ayuda, y mucho, a que los objetivos escolares se puedan desarrollar en los momentos adecuados.

Apostar por la educación, lo venimos repitiendo año tras año, es realizar una buena inversión en esta tierra. Por ello, a pesar de las dificultades que podemos encontrar tanto en España como en Nicaragua, seguiremos trabajando buscando una buena rentabilidad cada año. Hasta ahora, después de seis años, los resultados han sido casi inmejorables.

Aprovechamos para felicitar a los padrinos de estos niños que siguen confiando en nosotros y, no sin esfuerzo, hacen posible que los gastos económicos que conlleva el aula de Preescolar queden cubiertos.