martes, 20 de agosto de 2013

El encuentro de la medicina con la pobreza


Me gradué en el año 2000 como médico y tuve la dicha de brindar mi servicio social en las zonas más vulnerables y de extrema pobreza de mi país (Nicaragua). Esto afianzó mi vocación al servicio de los más necesitados.

Dios tiene un plan perfecto para cada uno y siento que me colocó en el lugar idóneo en donde puedo ponerlo en marcha. Fue en el 2006 que inicié mi trabajo en el Dispensario Médico San Marcos de la Asociación Hijos del Maíz en la comarca San Blas. En estos siete años he podido realizarme como persona, como médico, como profesional y sobre todo como humano.

Al solidarizarme con la pobreza y el sufrimiento de las familias de las comunidades que visito en mi trabajo de terreno y de los que acuden al dispensario, me motiva a buscar soluciones que den respuesta a la demanda de la población así como a las adversidades que se presentan en el campo de la salud.

Cuando se presenta la oportunidad de tener en el consultorio a los estudiantes de medicina voluntarios que nos visitan de diferentes países, procuro que, además de adquirir conocimientos sobre las enfermedades, su diagnóstico y tratamiento, puedan también experimentar el contacto con la realidad de los pacientes: sus hábitos, pobreza, cultura y forma de vida. Esto permite también que experimenten la importancia de servir con vocación, entrega, sacrificio y amor, además de sensibilizarse y solidarizarse con el dolor ajeno. Estas vivencias le han cambiado la vida a muchos de los que nos han visitado.

Moisés Abraham Roles Mojica
Responsable del Dispensario Médico San Marcos